Cuando los niños no quieren abrigarse
¿Qué hacer cuando los niños no quieren abrigarse? Las razones por las cuales los niños se resisten a usar abrigo pueden ser varias.
Porque les incomoda para poder jugar cómodamente, porque su metabolismo y
actividad hacen que se acaloren rápidamente, o cuando están entrando a la
adolescencia por razones estéticas.
Cualquiera sea la razón, lo cierto es que
en inviernos los niños deben estar abrigados para evitar los estados gripales,
o cualquier otro tipo de enfermedad producida por los cambios climáticos.
Cuando los niños son pequeños es más fácil controlar su rebeldía y sus
caprichos cuando no quieren abrigarse, pero que sucede cuando los niños comienzan
a crecer.
Según los especialistas en comportamiento infantil, este problema es
más común en los niños varones que en las niñas. Una de las razones por la que
los varones no quieren abrigarse es porque están desarrollando su masculinidad
y aguantar el frío sin usar abrigo es una manera para hacerlo y sentirse
hombrecitos. Los especialistas recomiendan a los padres no confrontar las
decisiones del hijo pero aclararle que si llegara a enfermarse a causa de no
usar abrigo es responsabilidad de su propia decisión, siempre teniendo en
cuenta las condiciones climáticas y la actitud del hijo. Si el hijo se pone
desafiante y a pesar de las condiciones climáticas persiste con el capricho,
los padres deben hacerse cargo de la situación abrigando a su hijo a pesar de
todo. Si el hijo por el contrario recapacita y piensa en las consecuencias que
puede provocar un resfriado, la situación la revertirá el propio hijo sin
necesidad de usar medidas autoritarias por parte de los padres, esta sería la
situación ideal. Se puede llegar a este tipo de resultado informando al hijo de
las enfermedades que puede contraer en invierno hablando de manera tranquila y
adulta para que el chico sienta en cierta medida que los padres consideran que es
una persona responsable, madura y confían en las decisiones que pueda tomar.
Además no está de más recordarte que una de las mejores maneras de evitar que
tu hijo se enferme es brindarle una buena alimentación para mantener sus
defensas altas.
